Lávate las manos con regularidad: antes de colocarlas y después, y antes de quitarlas.
Las uñas siempre cortadas. Esto es importante para no hacerte daño en la córnea. Habitualmente podemos encontrar alguna úlcera superficial por intentar retirar la lente de contacto con las uñas en mal estado.
Usa el líquido de lentillas adecuado. Nosotras te recomendaremos el líquido adecuado al tipo de lentillas que necesites. Éste nunca debe estar caducado y generalmente suelen deteriorarse a los dos meses de abrirlo.
Desinfecta el estuche cada 7-10 días. Esto se suele hacer con agua a 70º y secando con un papel que no deje residuos. No mezcles el estuche en compartimentos sueltos en el bolso, lleva un pequeño neceser donde lo protejas
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Comprueba el estado de las lentes de contacto cada vez que te las pongas y te las quites.
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Maquíllate después de ponerte las lentes de contacto. Así no arrastrarás ningún residuo entre la córnea y la lente.
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Si las lentes son mensuales, no las uses durante más tiempo. Es necesario cambiar las lentes de contacto, evitarás la hipoxia en un futuro (falta de oxígeno).
8. Realiza una revisión cada 6 meses. En nuestro establecimiento tenemos las últimas actualizaciones en los aparatos más adecuados para poder adaptar lentes de contacto, como es el tópografo, donde podremos observar la curvatura corneal de forma precisa y adaptarte la mejor lente de contacto.